domingo, 3 de enero de 2016

Cabaña de palos

En otoño/invierno es muy frecuente ver como "esquilan" los árboles, les dejan desnudos. A sus pies queda un montón de ramas maravillosas atadas y listas para ser quemadas...a no ser que pasemos nosotros y les demos un uso mucho más divertido: "construir una cabaña".

Los niños están acostumbrados a juguetes de construcción pequeños de volumen. Es interesante darles la oportunidad de que su obra de ingeniería tenga su tamaño y pueda ser usada por él mismo. 
El hecho de usar materiales que iban a ser descartados nos relaja a los padres porque no hemos tenido que hacer más desembolso que poner ilusión y darles el soporte anímico  para hacerlo. 
Es un proyecto ideal para trabajar en equipo, deben colaborar en sujetar entre varios las partes. Se sienten muy muy orgullosos de haber conseguido semejante proeza, y han aprendido a hacer su casita de emergencia.

Elige las ramas, ahora palos, más largas. Quita, si tuviera ramitas pequeñas. Diseña  un modelo de estructura sencillo y une los palos con cuerda. Nosotros usamos trapillo color caqui y así queda camuflado.

Después de hacer una estructura refuérzala con más palos, estos pueden ser menos resistentes.
Un vecino podó una palmera, sus hojas fueron ideales para cubrir toda la estructura. 

La hicimos en tiempo record y aún así es preciosa, decora el jardín y es un lugar ideal de juegos resistente a la lluvia.

1 comentario:

  1. Me encanta!, Sí señor!, hay que aprovechar todos los recursos que nos ofrece la naturaleza. Y encima se entretienen y divierten.

    ResponderEliminar